sábado, 5 de diciembre de 2015

Cotidianidad o la belleza de lo líquido

Manuel Cózar Moreno presenta su segundo poemario: Agua


Quizá un despertar de los versos sumergidos simplifique la pragmática literaria. El azul cielo, que aguardaba poemas de amor y recuerdos bajo el título Agua, combinaba con el color de los asientos repletos de un público entregado.

No quiero decir que soy feliz.
Escondo mi felicidad detrás de mi silencio.
Si tengo que explicar el brillo de mi mirada,
te enseñaré mis antiguas lágrimas.
Tengo miedo de que al decirlo,
por abrirlo de su secreto,
se lleve el viento ese “vulanico”.
Delicado ser de inconstante destino,
felicidad del viento.

Poema Vulanico del libro Agua. Manuel Cózar Moreno.


El verso libre se encargaba de amenizar aquella tarde de viernes que se conjuraba en una mezcla de frío aceptable, rasguños de cara a las próximas elecciones generales, una navidad ya acomodada en los decorados y alusiones a una recolección de aceituna que este año se había adelantado.

Manuel Cózar Moreno comenzó la presentación de su segundo libro de poesía “más emocionado que nervioso” en un acto acogido por el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Huelma (Jaén). Acompañado en la mesa por Paqui López y Juan Espinosa, el autor de Agua, que compatibiliza el amor por los mundos sutiles con su labor como Secretario del Ayuntamiento de Huelma ya durante 5 legislaturas, expuso su defensa en el libro del agua, ya que determina el hilo conductor. Defendió, a su vez, a los poetas a los que más admiraba, como: Juan Ramón Jiménez, Pablo Neruda, María Zambrano o el joven Antonio Lucas.

El ojo miente.
La noche no es la noche,
sino un relámpago lanzado contra el pecho,
-entrad sin miedo-,
un corazón con leve cólera prendido.

Poema Ficciones del libro Los mundos contrarios. Antonio Lucas.


El recuerdo de los cuentos que comenzaban con `había una vez´, la consideración externa de la separación del lugar y la figura de sus padres en su memoria, tradujeron una tarde común y corriente, que aunque evocaba la misma raíz en base a la cotidianidad, en un edén literario.







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